“LA MANIPULACIÓN MEDIATICA HACE MÁS DAÑO QUE LA BOMBA ATÓMICA, PORQUE DESTRUYE LOS CEREBROS”
NOAM CHOMSKY
En el acontecer político muy pocos eventos suceden por mera casualidad la mayoría son fruto de una causalidad, producto de estrategias encaminadas a la consecución de los objetivos y aspiraciones específicas de los partidos y sus militancias. En este contexto la función de representación mediática por parte de los medios masivos de comunicación, incluidas las redes sociales, tiene un lugar importante en la producción de realidades que van dando origen a un criterio ciudadano que será decisivo en el ejercicio democrático frente a las urnas.
Con este panorama no es de sorprendernos la campaña que algunos periodistas han iniciado para impulsar la candidatura presidencial recién anunciada del senador Jorge Robledo, como prueba de ello tenemos al periodista Daniel Coronell quien recibió una serie de reclamos por parte de los ciudadanos después de publicar en su cuenta de twitter que había votado en blanco en la pasadas elecciones presidenciales, opción también elegida y divulgada por Robledo en segunda vuelta de dicha contienda política , tal vez peque por estar hilando muy fino, pero es inevitable, más aún al ver como a pocas horas del anuncio de la pretensión presidencial del senador Jorge Robledo, Coronell realiza una nueva publicación apoyando firmemente su candidatura. Y si de coincidencias hablamos podríamos recordar también a su tocayo el periodista Daniel Samper quien unas semanas atrás acudiendo a un desatinado montaje hizo circular a través de su cuenta de twitter una foto del senador Gustavo Petro cuya imagen cuestionaba la coherencia de la opinión del congresista frente al escándalo desatado por un trino del empresario Mario Hernández pues en la imagen se puede ver a Gustavo Petro sosteniendo unas bolsas con la marca MH, su apunte “humorístico” dejo ver claramente su intención de desprestigiar la imagen del polémico senador Petro quien últimamente ha tenido claros desacuerdos con Jorge Robledo, es el juego de ensuciar la imagen de un candidato para hacer ver más favorable la imagen del opositor.
Cabe recordar que esta no es la primera vez que el senador Jorge Robledo le apuesta a la carrera por la presidencia. En 2017 decidió también lanzarse con el aval del Polo Democrático Alternativo, sin embargo no alcanzó el umbral para llegar a la primera vuelta de las elecciones y terminó uniéndose a la campaña de Sergio Fajardo por la Coalición Colombia. Todo esto en el marco de un movimiento de izquierda fragmentado que se debate entre el progresismo y una tendencia de centro que se ha beneficiado de este, pero que al final acude a la fuerza que más le convenga a sus militantes para lograr sus pretensiones electorales y políticas en general.
Así que no sería nada raro que esta nueva candidatura del senador Jorge Robledo tuviera como fin subrepticio restar votos a favor de Gustavo Petro debilitando sus posibilidades de llegar a la presidencia, para posteriormente aliarse, como lo hizo en el pasado, con el también candidato presidencial Sergio Fajardo y simultáneamente ayudar al uribismo a ganar un poco del terreno perdido pues él en reiteradas ocasiones a declarado su “tibieza política” la cual lo deja a merced de “bailar al son que le toquen” y para nadie es un secreto que “la orquesta del Centro Democrático” es la que más duro suena en la realidad política del país.